miércoles, 30 de junio de 2010

Los 600 segundos más largos...

No sabía si era anómalo que aquella máquina empezara a sonar. Era la primera vez que me lo hacía. Nunca me han gustado esos uniformes blancos que le pedía a los reyes que me trajeran para jugar a auscultarnos con el vecino de al lado. "¿Cuántos años tienes?"-"27"-"Todo bien". Las mismas palabras que resonaron durante meses en mi cabeza cuando nada funcionaba. Lo leí mientras me mandaban a otra sala. "No te vayas todavía. Te esperan en el cuarto de al lado". Cuando salí de aquel edificio vi que sólo habían pasado 10 minutos. 600 segundos que invertí en amortizar mi tarifa plana con la poca respiración que me quedaba. Me ahogaba pero todo bien. Pasara lo que pasara, siempre he hecho lo que he querido y no me quedar con ninguna palabra en la boca. Me dio tiempo a cerrar la entrevista de hoy y a ponerles la carne de gallina mientras relativizaban. Intenté relajarme pero estaba muerta de miedo. "¿Ya?". Por fin mi turno. Entre risas hice uso de mi peculiar humor negro. "Son sólo 6 milímetros". ¿Qué significa eso en un cuerpo que apenas supera ya los 55 kilos? Y viniste para regarme, aunque no mis hojas, como otras veces que plantas sobre tierra. Por primera vez bajo tierra para que no viera y protegerme de lo que hay fuera. Sin semillas podridas, volverán a nacer. Florecerán. Lo sé.