miércoles, 21 de julio de 2010

Primera parada del verano

Sólo dos horas y a disfrutar de mi derecho a las vacaciones. No es un premio, es lo merecido después de meses ahogada por la adrenalina. Sólo un día para largarnos con el coche al desierto y abrasarnos sin quemarnos bajo al sol. Cuatro días son suficientes para desconectar del decorado de esta ciudad que ya empieza a saturar. Dejaremos las prisas en Madrid, lanzaremos las cenizas por la ventanilla para que se desvanezcan con el viento y nos olvidaremos de las ya no preocupaciones ¡Feliz día uno de premio! ¡Te lo has ganado! Primer destino: Alburquerque. Objetivo: estrenar el coche nuevo de gasolina sin formar una caravana que sobrepase los tres coches.
Bailaremos sin brisa hasta el amanecer para celebrarlo. Ni sexo, ni drogas ni Rock and Roll. Los 70 quedaron lejos por mucho que nos empeñemos en llevar pantalones vaqueros de tiro largo. Da igual que sea Post punk, Pop tropical, sólo pop, minimalista, powerpop…. Ahora se llama indie, “es el nuevo siglo, baby”-, si no sabes que está sonando, es indie; si lleva gafas y barba, es indie y si te pones de marinerita en vez de pirata, eres una “nena” pero indie también. Este año han tirado la casa por la ventana y se suma al cartel el grupo internacional The Pains of Being Pure at Heart, todo un privilegio poder recrear en directo mis escenas matutinas, antes de meterme en la ducha, bailando sus letras inventándome coreografías desafinando “Everything With You”. Por una vez, haré playback. El plato fuerte, y no por tirar hacia el territorio pero sí porque no me tengo que esforzar en traducir sus letras, todas las bandas nacionales que van a subirse al escenario rememorando las bandas sonoras de aquellos momentos inolvidables de nuestros días. Y cuando decaiga la noche llegan Ellos para recordarnos a los mejores. Nos ha costado un año planearlo pero lo hemos conseguido. No veías la ilusión que nos hace formar caravana para veros.

Regreso, breve paréntesis de tres días, cambio de maleta y candado. Me aseguro de que está bien cerrado. Bye, bye babys. De vuelta, me voy al país de los grandes contrastes. Creo que nos llevaremos bien.